29 de abril de 2014
7 de julio de 2012
Resistencia al cambio...un juego de saber y entender las motivaciones del legítimo otro.
Esta comprobado que los individuos no se resisten al cambio, por lo general suelen resistirse a ser cambiados.
Cuando se propone una combinación a medida, basada y pensada en las necesidades del individuo, teniendo en cuenta sus motivaciones el cambio generalmente es aceptado.
Les dejo estos videos para que disfruten...
Les dejo estos videos para que disfruten...
11 de enero de 2011
¿Qué nos esta pasando?
"Construimos casas cada vez más grandes…
y familias más pequeñas.
Gastamos más… pero tenemos menos.
Compramos más… pero lo disfrutamos menos.
Habitamos en edificios más altos…
con vidas poco profundas.
Vamos por autopistas más amplias…
pero con mentes cada vez más estrechas.
Tenemos más comodidades…
pero vivimos más incómodos.
Tenemos más conocimiento…
y menos sensatez.
Más expertos… y menos soluciones.
Más medicinas … y menos salud.
Son tiempos de comida rápida…
y de digestión lenta.
De casas fantásticas … con hogares rotos.
De enojarnos enseguida…
pero perdonar lentamente.
De salir muy temprano…
y llegar siempre tarde.
Levantamos las banderas de la igualdad,
pero sostenemos los prejuicios.
Tenemos la agenda llena de teléfonos de amigos
a los que nunca llamamos…
Y los estantes de nuestra biblioteca repletos de libros,
que jamás leeremos…
Nos ganamos la vida,
pero no sabemos cómo vivirla.
Poseemos cada vez más cosas,
y desperdiciamos casi todas."
Rimpoché
Me da la sensación de estar viendo una "Carreras de galgos", donde los perros corren tras una liebre artificial hasta llegar a la meta. La liebre va siempre por delante de ellos, y nunca pueden darle alcance. El primero en llegar es el ganador.
Curiosa época en la que vivimos… la mayoría de nosotros nos movemos por la vida como esos galgos, llevamos nuestras cabezas cargadas de objetivos y sueños que se apoyan en el aire, liebres que nos atraen, y a las que muchas veces perseguimos sólo porque otros alguna vez nos dijeron que era eso lo que necesitábamos para ser felices.
En el mejor de los casos, y sólo si sabemos sumar a la motivación inicial la perseverancia necesaria, atrapamos la liebre.
En ese momento disfrutamos del éxito, hemos ganado, tenemos el premio. Momentos de gloria que se esfuman en minutos......
Poco después nos llega a la boca el otro sabor, ya conocido, sabor a vacío, a nada, y a sed… Ya está, ya lo has logrado… ¿y ahora qué?
Estás igual que antes, o quizás peor, porque antes al menos tenías un sueño al que apuntar, un sueño lleno de esperanzas, uno que creías que escondía detrás la felicidad…
Lamentablemente acabas de comprobar que tu sueño anhelado, y por el que tanto has luchado, no se diferencia en nada de los otros, de todos aquellos sueños anteriores por los que en su día apostaste y que resultaron tan vacíos de contenido como éste. Una vez más, la liebre que has atrapado es artificial.
No es grave, volverás a empezar, la historia es circular y se repite.
Lo triste es que no aprendemos, caemos una y otra vez, como animales bobos, en la misma trampa, nos levantamos, nos lamemos un poco las heridas y volvemos corriendo a la misma pista, los demás ya están corriendo, por favor otra ficha, necesito otra juagada, voy por la revancha...
Y si nos paráramos un poco, por una vez y sin que sirva de precedente, y si esta vez para variar, nos preguntáramos antes de zarpar al siguiente puerto, qué esperamos encontrar en ese viaje, qué nos aportará llegar allí, para qué viajamos.
Quizás esta vez, si así lo haces, descubras que lo que persigues y esperas encontrar al otro lado de la puerta, está más cerca de lo que parece, que el camino es más corto, y hasta más fácil.
¿Cuántas liebres más seguiremos persiguiendo hasta acabar agotados sin ni siquiera saber si nos gusta su sabor?
y familias más pequeñas.
Gastamos más… pero tenemos menos.
Compramos más… pero lo disfrutamos menos.
Habitamos en edificios más altos…
con vidas poco profundas.
Vamos por autopistas más amplias…
pero con mentes cada vez más estrechas.
Tenemos más comodidades…
pero vivimos más incómodos.
Tenemos más conocimiento…
y menos sensatez.
Más expertos… y menos soluciones.
Más medicinas … y menos salud.
Son tiempos de comida rápida…
y de digestión lenta.
De casas fantásticas … con hogares rotos.
De enojarnos enseguida…
pero perdonar lentamente.
De salir muy temprano…
y llegar siempre tarde.
Levantamos las banderas de la igualdad,
pero sostenemos los prejuicios.
Tenemos la agenda llena de teléfonos de amigos
a los que nunca llamamos…
Y los estantes de nuestra biblioteca repletos de libros,
que jamás leeremos…
Nos ganamos la vida,
pero no sabemos cómo vivirla.
Poseemos cada vez más cosas,
y desperdiciamos casi todas."
Rimpoché
Me da la sensación de estar viendo una "Carreras de galgos", donde los perros corren tras una liebre artificial hasta llegar a la meta. La liebre va siempre por delante de ellos, y nunca pueden darle alcance. El primero en llegar es el ganador.
Curiosa época en la que vivimos… la mayoría de nosotros nos movemos por la vida como esos galgos, llevamos nuestras cabezas cargadas de objetivos y sueños que se apoyan en el aire, liebres que nos atraen, y a las que muchas veces perseguimos sólo porque otros alguna vez nos dijeron que era eso lo que necesitábamos para ser felices.
En el mejor de los casos, y sólo si sabemos sumar a la motivación inicial la perseverancia necesaria, atrapamos la liebre.
En ese momento disfrutamos del éxito, hemos ganado, tenemos el premio. Momentos de gloria que se esfuman en minutos......
Poco después nos llega a la boca el otro sabor, ya conocido, sabor a vacío, a nada, y a sed… Ya está, ya lo has logrado… ¿y ahora qué?
Estás igual que antes, o quizás peor, porque antes al menos tenías un sueño al que apuntar, un sueño lleno de esperanzas, uno que creías que escondía detrás la felicidad…
Lamentablemente acabas de comprobar que tu sueño anhelado, y por el que tanto has luchado, no se diferencia en nada de los otros, de todos aquellos sueños anteriores por los que en su día apostaste y que resultaron tan vacíos de contenido como éste. Una vez más, la liebre que has atrapado es artificial.
No es grave, volverás a empezar, la historia es circular y se repite.
Lo triste es que no aprendemos, caemos una y otra vez, como animales bobos, en la misma trampa, nos levantamos, nos lamemos un poco las heridas y volvemos corriendo a la misma pista, los demás ya están corriendo, por favor otra ficha, necesito otra juagada, voy por la revancha...
Y si nos paráramos un poco, por una vez y sin que sirva de precedente, y si esta vez para variar, nos preguntáramos antes de zarpar al siguiente puerto, qué esperamos encontrar en ese viaje, qué nos aportará llegar allí, para qué viajamos.
Quizás esta vez, si así lo haces, descubras que lo que persigues y esperas encontrar al otro lado de la puerta, está más cerca de lo que parece, que el camino es más corto, y hasta más fácil.
¿Cuántas liebres más seguiremos persiguiendo hasta acabar agotados sin ni siquiera saber si nos gusta su sabor?
21 de agosto de 2010
La vida será como un juego?....
.......Tiene un principio.....en algún momento finaliza.....hay reglas.
A veces.....parece muy fácil.....a veces es extremadamente dificil......a veces parace que estas perdiendo....a veces pararece que vas ganando......a veces pasa rápido......a veces se hace lenta.....no sabemos el resultado final.....ni cuanto dura....y mucho menos cuando termina...
Quizás sea muy simple.....quizás sumamente compleja.....
O.....simplemente quizás lo que mejor podemos hacer es, tener un objetivo claro, vivirlo en plenitud, hacer el bien y aprender de esta vida. Ya que nacimos, y....... quizás esto, sea empezar ganando.
El resto depende de nosotros, que si queremos, puede llegar a ser como un juego......
25 de abril de 2010
Paracaidas
Charles Plumb, era piloto de un bombardero en la guerra de Vietnam.
Después de muchas misiones de combate, su avión fue derribado por un misil.
Plumb se lanzó en paracaídas, fue capturado y pasó seis años en una prisión norvietnamita. A su regreso a Estados Unidos, daba conferencias relatando su odisea, y lo que aprendió en la prisión.
Un día estaba en un restaurante y un hombre lo saludó:
Le dijo "Hola, usted es Charles Plumb, era piloto en Vietnam y lo derribaron verdad?" "Y usted, ¿cómo sabe eso?", le preguntó Plumb.
"Porque yo empacaba su paracaídas. Parece que le funcionó bien, ¿verdad?"
Plumb casi se ahogó de sorpresa y con mucha gratitud le respondio.
"Claro que funcionó, si no hubiera funcionado, hoy yo no estaría aquí."
Estando solo Plumb no pudo dormir esa noche, meditando:
¿“Se preguntaba Cuántas veces vi en el portaviones a ese hombre y nunca le dije buenos días, yo era un arrogante piloto y él era un humilde marinero?"
Pensó también en las horas que ese marinero paso en las entrañas del barco enrollando los hilos de seda de cada paracaídas, teniendo en sus manos la vida de alguien que no conocía.
Ahora, Plumb comienza sus conferencias preguntándole a su audiencia:
¿"Quién empacó hoy tu paracaídas?".
Todos tenemos a alguien cuyo trabajo es importante para que nosotros podamos salir adelante. Uno necesita muchos paracaídas en el día: uno físico, uno emocional, uno mental y hasta uno espiritual.
A veces, en los desafíos que la vida nos lanza a diario, perdemos de vista lo que es verdaderamente importante y las personas que nos salvan en el momento oportuno sin que se los pidamos.
Dejamos de saludar, de dar las gracias, de felicitar a alguien , o aunque sea, decir algo amable sólo porque sí.
Hoy, esta semana, este año, cada día, trata de darte cuenta quién empaca tu paracaídas, y agradécelo.
Aunque no tengas nada importante que decir, envíale este mensaje a quien o a quienes alguna vez lo hicieron.
Y también mándaselo a quienes todavía no lo han hecho.
Las personas a tu alrededor notarán ese gesto, y te lo devolverán empacando tu paracaídas con ese mismo afecto
Todos necesitamos de todos, por eso demuéstrales tu agradecimiento.
A veces las cosas mas importantes de la vida solo requieren de acciones sencillas:
Solo una llamada, una sonrisa, un gracias, un Te Quiero, un Te Amo.
Qué tengas un Fabuloso Día!!!!
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